Octubre 19, 2023
El dolor de oídos es una cuestión muy importante en cualquier persona, pero aún más si se trata de niños pequeños.
Generalmente suele ser consecuencia de inflamaciones en el oído externo (la piel) o el oído medio (la mucosa), es decir, debido a una otitis. Si se produce en la piel, es una otitis externa, y si es en la mucosa, otitis media; ambas pueden ser consideradas agudas o crónicas en función de la gravedad de los síntomas.
Lo primero que deben hacer los padres del niño es acudir a un médico especialista, esto es, un otorrinolaringólogo.
Éste examinará los conductos auditivos con un otoscopio y determinará la causa del dolor, así como el tratamiento a seguir.
Si el otorrino observa que existen secreciones o cera en el conducto afectado, procederá a su limpieza mediante la técnica de aspirado con la ayuda de un otomicroscopio que le permitirá ver con detalle la estructura interna del oído. En cualquier caso, no se debe seguir un tratamiento según criterios personales, ya que debe ser el médico el que evalúe la situación y disponga el tratamiento necesario para que el dolor de oídos del niño remita.